EL PODER DEL TESTIMONIO
EL PODER DEL TESTIMONIO
“…Porque el testimonio de Jesús es el espíritu de profecía”. Apocalipsis 19:10b
La información, los hechos y el conocimiento llegan a la cabeza, pero no al corazón. Podemos discutir sobre la verdad todo lo que queramos, pero cuando damos un testimonio, va directo al corazón. Jesús compartió historias porque pasan del intelecto del lado izquierdo del cerebro al derecho y la experiencia se comparte y se vuelve personal. Dios es espíritu y lo adoramos en espíritu y en verdad. La verdad compartida en un testimonio se aferra al corazón de las personas y les permite experimentar a Dios al escuchar lo que hizo por ellos.
El avivamiento sucederá cuando los hijos de Dios se levanten y den testimonio de todo lo que Dios ha hecho por ellos. Es necesario contar las historias de Dios para que se dé a conocer el carácter de Dios. Personalmente, encuentro mucho más fácil testificar (dar testimonio) cuando puedo contar una historia personal que crea hambre de Dios en los demás. Sabemos por la historia que todo avivamiento comienza con el hambre. Sus historias de Dios crearán hambre en otros. Cuando usted comparta una respuesta a su oración, otros comenzarán a orar.
A la religión no le gustan los testimonios porque no se pueden controlar. Tal vez se haya encontrado con esto cuando compartió un testimonio con otro creyente y él se sintió ofendido en lugar de tener más hambre. No deje que eso le detenga.
Señor Jesús, te alabo en espíritu y en verdad. Te pido Espíritu Santo que traigas hambre por mi testimonio. Ato todo espíritu religioso que silencia los testimonios de Jesús. Humildemente libero mis historias de Dios en mi entorno para alentar la fe y el hambre que conducirán al avivamiento ahora. Jesús, tráeme avivamiento, dame un testimonio fresco para compartir hoy.
“…Porque el testimonio de Jesús es el espíritu de profecía”. Apocalipsis 19:10b
La información, los hechos y el conocimiento llegan a la cabeza, pero no al corazón. Podemos discutir sobre la verdad todo lo que queramos, pero cuando damos un testimonio, va directo al corazón. Jesús compartió historias porque pasan del intelecto del lado izquierdo del cerebro al derecho y la experiencia se comparte y se vuelve personal. Dios es espíritu y lo adoramos en espíritu y en verdad. La verdad compartida en un testimonio se aferra al corazón de las personas y les permite experimentar a Dios al escuchar lo que hizo por ellos.
El avivamiento sucederá cuando los hijos de Dios se levanten y den testimonio de todo lo que Dios ha hecho por ellos. Es necesario contar las historias de Dios para que se dé a conocer el carácter de Dios. Personalmente, encuentro mucho más fácil testificar (dar testimonio) cuando puedo contar una historia personal que crea hambre de Dios en los demás. Sabemos por la historia que todo avivamiento comienza con el hambre. Sus historias de Dios crearán hambre en otros. Cuando usted comparta una respuesta a su oración, otros comenzarán a orar.
A la religión no le gustan los testimonios porque no se pueden controlar. Tal vez se haya encontrado con esto cuando compartió un testimonio con otro creyente y él se sintió ofendido en lugar de tener más hambre. No deje que eso le detenga.
Señor Jesús, te alabo en espíritu y en verdad. Te pido Espíritu Santo que traigas hambre por mi testimonio. Ato todo espíritu religioso que silencia los testimonios de Jesús. Humildemente libero mis historias de Dios en mi entorno para alentar la fe y el hambre que conducirán al avivamiento ahora. Jesús, tráeme avivamiento, dame un testimonio fresco para compartir hoy.
Posted in 2024 Ayuno de Avance Espiritual
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