Considere Los Lirios
Considere Los Lirios
“Y por el vestido ¿por qué os afanáis? Considerad los lirios del campo, cómo crecen: no trabajan ni hilan; pero os digo, que ni aun Salomón con toda su gloria se vistió, así como uno de ellos. Mateo 6:28-29
Las personas superficiales se estresan por su imagen y pasan por alto quiénes son por dentro. Una parte esencial de seguir a Cristo es elegir dejar atrás los caminos superficiales.
Jesús no enseñó que la ropa y el atractivo físico fueran irrelevantes, simplemente no primordiales.
La simple pregunta que Jesús les hizo a sus discípulos ciertamente los golpeó en la cara como un reproche: ¿Por qué se preocupan por la ropa?
La ambición de impresionar a los demás, de sobresalir entre la multitud, de causar una buena impresión, es una motivación universal arraigada en el orgullo.
Cuando Jesús dijo, consideren los lirios del campo, no solo reprendió su orgullo, sino que les dio un principio significativo del reino: solo Dios puede revestirlos con verdadera belleza, llamar su identidad única y distinguirlos de los demás.
Note que Jesús no escogió algunas de las flores más extravagantes para hacer su punto—orquídeas, ave del paraíso, o flores de cerezo—él escogió flores silvestres.
Nunca será movido más allá de una relación superficial con Cristo hasta que reconozca que la identidad verdadera y distinta de su personalidad se encuentra en una relación íntima con Él.
Padre amoroso, hoy me humillo. Perdóname por esforzarme por causar una buena impresión y vivir superficialmente. Soy tu hijo(a), mi identidad se encuentra en Cristo, y amo a la persona que me has hecho ser.
¡Oremos Por Favor!
Estamos pidiéndole a Dios que el resto de los países del mundo y los estados de EE.UU. reciban la formación de la Escuela de Oración. Ore con nosotros hoy por Marshall Islands y Maine.
AÑO EN FUEGO
© Fred A. Hartley, III
Reservados todos los derechos
La Biblia estándar inglesa (ESV) se usa normalmente, a menos que se indique lo contrario.
Este encuentro diario con Cristo, iniciador de fuego, no pretende reemplazar su lectura diaria de la Biblia y su tiempo de oración, sino más bien motivarlo a pasar más tiempo en Su presencia
“Y por el vestido ¿por qué os afanáis? Considerad los lirios del campo, cómo crecen: no trabajan ni hilan; pero os digo, que ni aun Salomón con toda su gloria se vistió, así como uno de ellos. Mateo 6:28-29
Las personas superficiales se estresan por su imagen y pasan por alto quiénes son por dentro. Una parte esencial de seguir a Cristo es elegir dejar atrás los caminos superficiales.
Jesús no enseñó que la ropa y el atractivo físico fueran irrelevantes, simplemente no primordiales.
La simple pregunta que Jesús les hizo a sus discípulos ciertamente los golpeó en la cara como un reproche: ¿Por qué se preocupan por la ropa?
La ambición de impresionar a los demás, de sobresalir entre la multitud, de causar una buena impresión, es una motivación universal arraigada en el orgullo.
Cuando Jesús dijo, consideren los lirios del campo, no solo reprendió su orgullo, sino que les dio un principio significativo del reino: solo Dios puede revestirlos con verdadera belleza, llamar su identidad única y distinguirlos de los demás.
Note que Jesús no escogió algunas de las flores más extravagantes para hacer su punto—orquídeas, ave del paraíso, o flores de cerezo—él escogió flores silvestres.
Nunca será movido más allá de una relación superficial con Cristo hasta que reconozca que la identidad verdadera y distinta de su personalidad se encuentra en una relación íntima con Él.
Padre amoroso, hoy me humillo. Perdóname por esforzarme por causar una buena impresión y vivir superficialmente. Soy tu hijo(a), mi identidad se encuentra en Cristo, y amo a la persona que me has hecho ser.
¡Oremos Por Favor!
Estamos pidiéndole a Dios que el resto de los países del mundo y los estados de EE.UU. reciban la formación de la Escuela de Oración. Ore con nosotros hoy por Marshall Islands y Maine.
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La Biblia estándar inglesa (ESV) se usa normalmente, a menos que se indique lo contrario.
Este encuentro diario con Cristo, iniciador de fuego, no pretende reemplazar su lectura diaria de la Biblia y su tiempo de oración, sino más bien motivarlo a pasar más tiempo en Su presencia
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