Toda la Gloria

Toda la Gloria
Pastor Bill Hyer

Una de las doxologías más grandes en la Biblia es la declaración final de Pablo en Romanos 11:36: “Porque de él, y por él, y para él son todas las cosas. A él sea la gloria por los siglos. Amén.” En última instancia, todo lo que tenemos, lo hemos recibido “de él.” Debido a esto, toda la gloria debe ser dada “a El.”

Pablo, de manera sutil y amable, reprendió a los cristianos “arrogantes” de la iglesia en Corinto que estaban causando división en la iglesia porque pensaban que eran, en ciertos aspectos, superiores a otros cristianos. Les dijo: “¿Qué tienes que no hayas recibido? Y si lo recibiste, ¿por qué te glorías como si no lo hubieras recibido?” (1 Corintios 4:7). Les recordó que todo lo que tienen es algo que han “recibido” por gracia. Debido a esto, no pueden “jactarse” ni ser orgullosos de ello, sino que deben dar toda la gloria a Dios.
Una de las ilustraciones más poderosas de esto se ve en lo que el libro de Apocalipsis nos dice acerca de los “24 ancianos.” Ellos son miembros del consejo divino de Dios, quienes están sentados alrededor del trono de Dios en el cielo. Debido a esto, son algunos de los seres más poderosos en el universo. Apocalipsis 4:4 dice: “Alrededor del trono había veinticuatro tronos, y sobre los tronos, veinticuatro ancianos, vestidos de ropas blancas, con coronas de oro sobre sus cabezas.” Luego, Apocalipsis 4:10-11 continúa diciendo que cuando la adoración a Dios estalla en el cielo, “los veinticuatro ancianos se postran delante de él que está sentado sobre el trono, y adoran al que vive por los siglos de los siglos, y echan sus coronas delante del trono, diciendo: ‘Señor y Dios nuestro, digno eres de recibir la gloria, la honra y el poder; porque tú creaste todas las cosas, y por tu voluntad existen y fueron creadas.’” Verdaderamente, ellos saben que todo lo que poseen lo han recibido “de Él.” Debido a esto, dan toda la gloria “a Él,” diciendo: “Digno eres, porque todo viene de ti.”

Oremos: Padre, toda la gloria es para ti. Tú recibes toda la gloria porque mereces toda la gloria. No tengo nada que no haya recibido de ti, y todo lo que he recibido es para darte finalmente gloria.

¡Oremos por un Avance Espiritual en las Naciones!:
Cada día durante este ayuno le pedimos que se unas a nosotros en la oración por las naciones restantes donde la Escuela de Oración aún no está sirviendo a las iglesias.
Oremos hoy por Maldivas (Océano Índico).
“Aclamad con júbilo al SEÑOR, toda la tierra!” Salmo 100:1

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