Bienaventurados los que Tienen Sed
Bienaventurados los que Tienen Sed
Directora del Equipo de Oración Sherry Hartley
“ En el último y gran día de la fiesta, Jesús se puso en pie y alzó la voz, diciendo: Si alguno tiene sed, venga a mí y beba. El que cree en mí, como dice la Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva.” - Juan 7:37-38
Jesús desea llenarnos. Él es la fuente de toda bendición. Él cumple nuestros deseos más profundos en la vida. Él satisface nuestra alma. En estos versículos, Jesús nos invita a venir y beber de Él. Necesitamos acercarnos a Él y recibir de Su abundancia. Lleve a Él su sed, sus anhelos, sus lugares secos, sus sueños, sus deseos y sus necesidades. Siéntese en Su presencia y reciba. Él desea encontrarse con usted. Al acercarse con las manos abiertas para recibir, Él le colma con Su paz y descanso. Él quiere que reciba Sus promesas y sepa que Él hará un camino para usted.
Cuando el cáncer de mi madre regresó en 1989, estaba tan angustiada que me fui a mi dormitorio y lloré desconsoladamente sobre mi almohada. Mi Biblia estaba en la mesita de noche y la tomé con desesperación. Se abrió en Filipenses 4:4-5 “Regocijaos en el Señor siempre; otra vez os lo digo: ¡Regocijaos! Vuestra gentileza sea conocida de todos los hombres. El Señor está cerca.” Dejé de llorar. Pensé en mi mente, “¿Cómo puedo regocijarme?” Pero entonces recibí la promesa: “El Señor está cerca.” Sentí que sus palabras de consuelo me envolvían con su amor. Él estaba conmigo. Caminaría conmigo durante el siguiente mes enfrentando la realidad de que mi madre estaba muriendo y pronto iría al cielo. Él estaba con ella durante esos días, y estaba conmigo durante esos días. Nos dio la “paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.”
Oremos: Señor Jesús, tengo sed de ti. Satisface los anhelos más profundos que traigo en este tiempo de ayuno. Recibo tu presencia y tus promesas hoy. Mi esperanza está en Ti.
¡Oremos por un Avance Espiritual en las Naciones!:
Cada día durante este ayuno le pedimos que se unas a nosotros en la oración por las naciones restantes donde la Escuela de Oración aún no está sirviendo a las iglesias.
Oremos hoy por Tonga
“Y este evangelio del reino será predicado en todo el mundo, como testimonio a todas las naciones, y entonces vendrá el fin.” Mateo 24:14
Directora del Equipo de Oración Sherry Hartley
“ En el último y gran día de la fiesta, Jesús se puso en pie y alzó la voz, diciendo: Si alguno tiene sed, venga a mí y beba. El que cree en mí, como dice la Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva.” - Juan 7:37-38
Jesús desea llenarnos. Él es la fuente de toda bendición. Él cumple nuestros deseos más profundos en la vida. Él satisface nuestra alma. En estos versículos, Jesús nos invita a venir y beber de Él. Necesitamos acercarnos a Él y recibir de Su abundancia. Lleve a Él su sed, sus anhelos, sus lugares secos, sus sueños, sus deseos y sus necesidades. Siéntese en Su presencia y reciba. Él desea encontrarse con usted. Al acercarse con las manos abiertas para recibir, Él le colma con Su paz y descanso. Él quiere que reciba Sus promesas y sepa que Él hará un camino para usted.
Cuando el cáncer de mi madre regresó en 1989, estaba tan angustiada que me fui a mi dormitorio y lloré desconsoladamente sobre mi almohada. Mi Biblia estaba en la mesita de noche y la tomé con desesperación. Se abrió en Filipenses 4:4-5 “Regocijaos en el Señor siempre; otra vez os lo digo: ¡Regocijaos! Vuestra gentileza sea conocida de todos los hombres. El Señor está cerca.” Dejé de llorar. Pensé en mi mente, “¿Cómo puedo regocijarme?” Pero entonces recibí la promesa: “El Señor está cerca.” Sentí que sus palabras de consuelo me envolvían con su amor. Él estaba conmigo. Caminaría conmigo durante el siguiente mes enfrentando la realidad de que mi madre estaba muriendo y pronto iría al cielo. Él estaba con ella durante esos días, y estaba conmigo durante esos días. Nos dio la “paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.”
Oremos: Señor Jesús, tengo sed de ti. Satisface los anhelos más profundos que traigo en este tiempo de ayuno. Recibo tu presencia y tus promesas hoy. Mi esperanza está en Ti.
¡Oremos por un Avance Espiritual en las Naciones!:
Cada día durante este ayuno le pedimos que se unas a nosotros en la oración por las naciones restantes donde la Escuela de Oración aún no está sirviendo a las iglesias.
Oremos hoy por Tonga
“Y este evangelio del reino será predicado en todo el mundo, como testimonio a todas las naciones, y entonces vendrá el fin.” Mateo 24:14
Posted in 2025 Ayuno de Avance Espiritual
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