Pidiendo Por Las Naciones
Pidiendo Por Las Naciones
Pídeme, y te daré por herencia las naciones. Salmo 2: 8
Dios quiere construir su músculo de fe. Él no solo quiere que desee lo que Él quiere, sino que quiere que lo persiga con todo su corazón. No hay nada más relevante para la construcción del musculo de fe, que pedir las naciones. Pedir las naciones es parte del proceso de maduración de la oración.
La vida cristiana es una forma de campo de entrenamiento espiritual en el que Cristo orquesta las circunstancias alrededor de nosotros para que los propósitos de Dios estén siempre al alcance de la mano.
El Salmo 2 es un salmo mesiánico. Inicialmente, Dios el Padre exhortó al Hijo a pedirle las naciones. Ahora, venimos y preguntamos al Padre en el Nombre de Jesús por las naciones. Queremos la gloria de Cristo entre las naciones. Queremos que cada rodilla se doble y cada lengua confiese que Jesucristo es el Señor.
Así como a menudo oramos, Señor, enséñanos a orar, comience a pedir más específicamente, Señor, enséñanos a orar por las naciones. Él responderá esta oración.
El tamaño de su vida de oración se revela por el tamaño de las respuestas a su oración. Entonces, ¿qué le está pidiendo a Dios? Comience a pedir por las naciones.
Padre Amado, enséñame a pedir por las naciones, en el Nombre de Jesús. Amén.
¡Oremos Por Favor!
Estamos pidiéndole a Dios que el resto de los países ds estados de EE.UU. reciban la formación de la Escuela de Oración. Ore con nosotros hoy el mundo y lopor Nauru y Colorado.
AÑO EN FUEGO
© Fred A. Hartley, III
Todos los derechos reservados.
A menos que se indique lo contrario, se usa la Biblia Inglesa Estándar (ESV).
Este encuentro diario con Cristo, que enciende el fuego, no tiene la intención de reemplazar su lectura diaria de la Biblia y el tiempo de oración, sino más bien sirve para motivarle a pasar más tiempo en Su presencia.
Pídeme, y te daré por herencia las naciones. Salmo 2: 8
Dios quiere construir su músculo de fe. Él no solo quiere que desee lo que Él quiere, sino que quiere que lo persiga con todo su corazón. No hay nada más relevante para la construcción del musculo de fe, que pedir las naciones. Pedir las naciones es parte del proceso de maduración de la oración.
La vida cristiana es una forma de campo de entrenamiento espiritual en el que Cristo orquesta las circunstancias alrededor de nosotros para que los propósitos de Dios estén siempre al alcance de la mano.
El Salmo 2 es un salmo mesiánico. Inicialmente, Dios el Padre exhortó al Hijo a pedirle las naciones. Ahora, venimos y preguntamos al Padre en el Nombre de Jesús por las naciones. Queremos la gloria de Cristo entre las naciones. Queremos que cada rodilla se doble y cada lengua confiese que Jesucristo es el Señor.
Así como a menudo oramos, Señor, enséñanos a orar, comience a pedir más específicamente, Señor, enséñanos a orar por las naciones. Él responderá esta oración.
El tamaño de su vida de oración se revela por el tamaño de las respuestas a su oración. Entonces, ¿qué le está pidiendo a Dios? Comience a pedir por las naciones.
Padre Amado, enséñame a pedir por las naciones, en el Nombre de Jesús. Amén.
¡Oremos Por Favor!
Estamos pidiéndole a Dios que el resto de los países ds estados de EE.UU. reciban la formación de la Escuela de Oración. Ore con nosotros hoy el mundo y lopor Nauru y Colorado.
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Este encuentro diario con Cristo, que enciende el fuego, no tiene la intención de reemplazar su lectura diaria de la Biblia y el tiempo de oración, sino más bien sirve para motivarle a pasar más tiempo en Su presencia.
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